Comunicaciones: Israel está conectado a las
principales redes internacionales de transferencia de datos comerciales,
financieros y académicos, y está totalmente integrado a los sistemas de
comunicaciones internacionales por medio de líneas submarinas de fibra
óptica y de satélites. El país ocupa un alto lugar, en base per cápita,
en líneas telefónicas, computadoras y usuarios de Internet.
Israel es uno de los pocos países de mundo que cuenta con un 100 por
ciento de digitalización de su red telefónica, lo que permite brindar
los más avanzados servicios a los abonados. Además, Israel cuenta con
una de las más altas tasas mundiales de penetración del teléfono
celular.
El servicio postal funciona a todo lo largo de Israel y lo conecta
con la mayoría de los países del mundo. El Servicio Filatélico ha
emitido más de 1.500 sellos; muchos de los más conocidos artistas
gráficos de Israel han ayudado a crear estas "tarjetas de visita" del
país, algunas de los cuales ya se han hecho acreedoras del status de
clásicos y son muy cotizadas por los filatelistas.
Carreteras:
En un país de distancias cortas, los automóviles, buses y camiones
constituyen el principal medio de transporte. En los últimos años la red
caminera se ha ampliado y mejorado extensamente para responder al
rápido aumento en número de vehículos y para lograr que incluso las
comunidades más remotas sean accesibles. La construcción de la Autovía
Transisraelí de varios carriles (Carretera 6), que enlaza Beer Sheva en
el sur con Rosh Hanikrá y Rosh Piná en el norte a lo largo de cerca de
300 kilómetros, está casi terminada. Esta carretera permite evitar las
zonas densamente pobladas, aliviando así la congestión del tráfico y
proporcionando un acceso rápido a la mayoría de las zonas del país.
Ferrocarriles: Los ferrocarriles de Israel
proporcionan servicio de pasajeros entre Tel Aviv, Jerusalem, Haifa,
Naharía Beer-Sheva, Ashkelon y Dimona. Además, servicios de carga sirven
los puertos de Ashdod y Haifa y los yacimientos de minerales al sur de
Dimona. En los últimos años ha aumentado la utilización de trenes de
carga y de pasajeros. Para ayudar a aliviar los problemas causados por
la creciente congestión de las carreteras, han entrado en servicio
últimamente varias líneas de cercanías que enlazan Tel Aviv y Haifa con
sus respectivas poblaciones suburbanas, por medio de unidades rápidas,
operando en coordinación con las líneas de autobuses. Muchos vagones
anticuados actualmente en uso están siendo reemplazados por coches
modernos con aire acondicionado, y se han introducido equipos modernos
para mantenimiento de las vías.
Sistema portuario: Los
antiguos puertos de Yafo y Acre (Acco) han sido reemplazados por tres
modernos puertos de aguas profundas en Haifa, Ashdod y Eilat, que sirven
a la navegación internacional. El puerto de Haifa es en la actualidad
uno de los mayores puertos de contenedores del Mediterráneo y opera en
él, también, una atareada terminal de pasajeros; el puerto de Ashdod es
empleado principalmente para mercaderías; y el de Eilat, en el Mar Rojo,
une a Israel con el hemisferio sur y con el Lejano Oriente. Además, en
Ashkelón opera un puerto petrolero, y en Hadera funcionan modernas
instalaciones para la descarga directa de barcos que proveen de carbón a
la vecina estación de energía eléctrica.
Consciente de que la ubicación geográfica de Israel le brinda el
potencial para transformarse en un país de tránsito para viajeros y
mercancías que cruzan la región, la Dirección de Puertos y Ferrocarriles
ha elaborado un plan a largo plazo para responder a las futuras
necesidades de transportes. Entre otras prioridades, recomienda
desarrollar un moderno sistema de ferrocarriles con equipo de avanzada
en cada etapa de sus operaciones terrestres y marítimas, y el
establecimiento de una red de sistemas computarizados que controle y
supervise todos sus servicios.
Aeropuertos: El aeropuerto internacional Ben-Gurión
(aproximadamente 25 minutos de viaje desde Tel Aviv, y 50 desde
Jerusalem) es la principal y más grande terminal aérea del país. Debido
al aumento previsto en el número de llegadas y partidas de pasajeros, el
aeropuerto ha sido ampliado considerablemente. Vuelos charter,
principalmente desde Europa, hacen uso de los pequeños aeropuertos de
Eilat y de Tel Aviv y vuelos internos utilizan el aeródromo de Rosh
Piná en el norte.